miércoles, 21 de diciembre de 2011

SOLSTICIO DE VERANO

Iniciando un nuevo ciclo solar, el solsticio de verano en el hemisferio Sur.

Momentos de comenzar a recoger la cosecha de lo q se ha sembrado durante el año, aquí coincide con el fin del año calendario, y, en lo particular, con un año más de vida.

Momentos de traer a la memoria conciente los logros y los fallos, haciendo hincapié en que los errores solo son intentos fallidos, pudiendo hacer nuevas elecciones en los momentos futuros.

Agradecer, agradecer y nuevamente agradecer por lo vivido, por lo manifestado, por lo sentido.

Desde un nuevo auto, hasta las lágrimas por la pérdida de mi perro de compañía x 14 años (el último acto de amor de Klaus, fue devolverme la posibilidad de llorar), pasando x instantes de conexión con humanos, con vegetales, con el cielo, con la Madre Tierra, con el viento y las tormentas, con el Sol y la Luna, con el mar…calmo o furioso.

Y conmigo misma…

Permitirme no hacer nada, y no culparme por eso.  Permitirme caer ¡Otra Vez!, en el error de querer arreglar vidas ajenas, pero al instante darme cuenta, ¡al fin! De que esa no es mi tarea, que es una forma de controlar la vida, (lo incontrolable!), impedir lo q considero negativo, robarle a la vida una parte de su manifestación…

Soñar, soñar alto, en forma ilógica, irracional, vivir momentos de zozobra y miedo viscerales, ancestrales, y otros de profunda paz y alegría, cuando extingo la risa quedando con un inmenso relax.

Detener el mundo cotidiano al percibir la belleza de una flor, el entusiasmo de un pájaro anidando o el nacimiento de un pollito.

Ver y escuchar en los medios de comunicación como alguien ve el vaso medio vacío, y otros, medio lleno, conformando esta dualidad mundana, sabiendo, que visto desde lo más hondo, conforma un entramado que sólo requiere calma, alegría y respiración profunda, un ¡ajá! De aceptación, para dejar ser al Universo.

Sentirme pequeña como una hormiguita o inmensa como el Cielo, percibiendo, no obstante que ocupo un lugar y este tiempo por algún motivo q, aunque lo desconozca, me lo merezco.

Doy las gracias por este nuevo ciclo vital, sintiendo que soy joven, y con experiencia!, que el Universo me trata muy bien, q vistas a la distancia, lo q consideré penas en su momento, son las arrugas y las canas q hoy me distinguen.

Las alegrías, los logros, materiales, intelectuales y sentimentales, conforman mi Ser actual, al que quiero y respeto.

Mis miedos, mis carencias, son los desafíos por sortear, que también me conforman. La pimienta de esta vida!!!

La introspección, el silencio, las palabras, los encuentros, este hablar desde el corazón y la mente, en un blog, para que alguien o nadie lo lea, me da igual…

Ese me da igual, implica Paz, el máximo deseo hoy, para vos.

Un profundo abrazo desde el corazón de Mabel.






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